El RC Polo de Barcelona se hizo con su trigésimo título de la Copa del Rey al ganar al Atletic Terrassa (1-3) en la final disputada en el Club de Campo de Madrid, donde siempre fue por delante y remató su victoria con un penalti córner perfectamente ejecutado por Roc Oliva y Xavi Lleonart.
El equipo de Carlos García Cuenca encauzó el choque en el segundo cuarto con un primer gol en el que Guillermo Fortuño empujó a puerta una bola de Alex Reyné y un segundo tanto de penalti córner, tres minutos después, cuando Marc Reyné acertó tras varios rechaces al tiro de Roc Oliva.